Estafas y fraudes financieros comunes que impactan a los negocios

Estafas y fraudes financieros en los negocios.
Estafas y fraudes financieros en los negocios.

En los negocios, como en la vida, estamos expuestos a riesgos de fraude y estafas en diferentes modalidades, situaciones que se dan debido al desconocimiento de las personas, falta de información y la buena voluntad.

Los delitos cometidos por estos estafadores terminan afectando a los comercios, impactando sus finanzas y perjudicando el dinero, tiempo y esfuerzo invertido por los comerciantes. Pensando en esto, le queremos contar cómo actúan estos delincuentes, cuáles son los fraudes más comunes y qué puede hacer para prevenirlos. 

Estafas y fraudes financieros: ¿cómo actúan los delincuentes?

Por llamadas, mensajes o correo electrónico

Generalmente, las personas que cometen fraudes o delitos financieros se hacen pasar por alguien que usted conoce o en quien confía. Puede ser una persona, una empresa o una entidad, por ejemplo: un proveedor, un trabajador o una compañía de servicios públicos. 

Al momento de cometer el delito, la mayoría de los delincuentes crea una sensación de urgencia, con el objetivo de que usted tome la decisión rápidamente sin dejarlo analizar la situación. Por ejemplo: le pueden decir que, si no paga la factura de la luz, le cortarán inmediatamente el servicio en su local. 

Estos delincuentes suelen usar nombres y direcciones falsos. También, utilizan métodos de pago que no dejan rastros como: el efectivo o las transferencias a líneas de celular que no cuentan con un plan de telefonía móvil. A continuación, le contamos las estafas y fraudes más comunes que cometen.

Tipos de modalidades de estafas y fraudes financieros

1. Fraude de identidad

Este tipo de fraude se origina cuando el delincuente utiliza la identidad de otra persona para cometer un delito. Por ejemplo: cuando se emplea una tarjeta de crédito robada para comprar un producto en su negocio o cuando un delincuente se hace pasar por uno de sus proveedores

2. Venta de productos falsos o en malas condiciones

En ocasiones, los delincuentes optan por vender materias primas o productos en malas condiciones, con mala calidad, falsos o que no cumplen con los estándares exigidos por las autoridades, por ejemplo, en materia de sanidad y salubridad. 

3. Facturas falsas de proveedores inexistentes

En este delito, los estafadores crean facturas falsas por productos o servicios que suele utilizar en su negocio, por ejemplo: bienes que ofrece en su tienda o productos de limpieza que usa en su local. Por lo general, los delincuentes se hacen pasar por sus proveedores, esperando a que sus trabajadores paguen por las facturas. Al ser bienes esenciales para el funcionamiento de su negocio, sus empleados e, incluso, usted, no dudará  en pagarlas. 

4. Falsificación de pagos 

Por lo general, este delito ocurre en los negocios digitales. En este caso, los delincuentes piden una serie de productos o servicios a su comercio y envían un comprobante de pago falso, en el que se muestra una transacción que realmente nunca se realizó. 

Algunos métodos que permiten identificar este tipo de fraudes son:

  • Verificación de documentos de identificación: Al aceptar pagos con tarjeta de crédito o débito, asegúrese de verificar la autenticidad de los documentos de identificación del titular de la tarjeta.
  • Uso de tecnología de seguridad: Utilice tecnología de seguridad avanzada, como lectores de tarjetas con chip y sistemas de detección de fraude que puedan identificar comportamientos sospechosos en las transacciones. 
  • Verificación de la autenticidad de los billetes: Capacite  a sus empleados para que puedan identificar características de seguridad en los billetes, como marcas de agua, hilos de seguridad y elementos holográficos. También puedes utilizar detectores de billetes falsos para verificar su autenticidad.
  • Análisis de patrones de compra: Preste atención a las transacciones inusuales, como compras repetitivas de alto valor o múltiples transacciones con diferentes tarjetas de crédito pero con información de envío similar. Estos patrones pueden indicar posibles actividades fraudulentas.

Si bien, estas son las estafas y fraudes más comunes, existen otros delitos financieros de los que puede ser víctima. Por ejemplo: cuando estafadores fingen llamarlo en nombre de una compañía de servicio público para que pague una factura que no existe, amenazándolo con cortar el servicio. 

Estafas y fraudes financieros: Recomendaciones para prevenirlos e identificarlos 

  1. Compruebe la identidad. Sin importar si se trata de un cliente, un proveedor o una empresa de servicios públicos, es importante que verifique la identidad. Para esto, puede solicitar otro documento de identificación, llamar a la empresa o contactar a la entidad.  
  1. Revise los productos. Al recibir los insumos o productos por parte de proveedores es importante que verifique las cantidades y que cada producto traiga las etiquetas exigidas por las autoridades del país. Por ejemplo: la autorización del Invima. 
  1. Verifique las facturas y los pagos. En las facturas con proveedores, le recomendamos revisar que vengan con la dirección, el Número de Identificación Tributaria (NIT), nombre de la empresa, logo, entre otros. También, le sugerimos verificar que le entreguen lo que usted pidió y, en caso de duda, llamar a la compañía proveedora. Respecto a los pagos de los clientes, le recomendamos comprobar que el pago haya entrado a su cuenta antes de enviar un pedido. 
  2. Cuidado con los números desconocidos o internacionales: No conteste o responda mensajes de números desconocidos o internacionales. Asimismo, evite compartir información financiera por teléfono o mensajes. Se recomienda utilizar aplicaciones o servicios de bloqueo de llamadas no deseadas en su teléfono móvil.
  3. Evite ingresar a enlaces sospechosos: Estos enlaces pueden redirigir a sitios web falsos o maliciosos diseñados para robar su información personal o financiera. Por eso, se recomienda que antes de abrir el enlace verifique su autenticidad puede hacerlo pasando el cursor sobre el enlace sin hacer clic para ver la dirección URL completa. Si parece extraña, contiene errores ortográficos o no coincide con el sitio web o la empresa que supuestamente representa, es mejor no hacer clic en él.

Finalmente, es importante que usted y sus trabajadores estén bien informados de los fraudes y estafas que se están cometiendo en el país. Al informarse y educarse en el tema, usted puede evitar que estos sucedan.